Homenaje a Newton - a la venta

Dalí rinde homenaje a Isaac Newton (1642-1727), el matemático inglés que descubrió la ley de la gravedad universal después de que se le cayera una manzana encima de la cabeza.
En esta escultura, basada en la pequeña imagen representada en la pintura Phosphene de Laporte (1932), Dalí perfora la figura creando dos vacíos, uno en el pecho y otro en la cabeza. El del pecho alude a la ausencia de los órganos vitales de Newton, y el de la cabeza sugiere su apertura mental. Dalí desea comunicar que Newton se convirtió en un simple nombre en el campo de la ciencia, completamente privado de su identidad personal.
Como es sabido, Dalí estaba obsesionado por el contraste entre lo duro y lo blando, y en la obra Homenaje a Newton transmite este concepto invirtiendo la anatomía de la figura y mostrando las protuberancias óseas que sobresalen del cuerpo. Al respecto, en su autobiografía La Vida Secreta, comenta: «La conformación de las caderas debe ser tal que haga sobresalir, irrevocables y agresivos, los huesos».
En 1986, el rey de España dedicó a Dalí una plaza de Madrid y el artista creó una efigie de Newton de casi 5 metros de altura que fue puesta en el centro de tal plaza, donde se conserva hasta nuestros días.